Ahora que estamos en verano, tenemos unas necesidades distintas, como la de mejorar ciertas zonas de la casa que empezamos a utilizar con más frecuencia, como el jardín o la piscina. Por ello, son muchos los clientes que se interesan por las barandillas o protecciones de acero inoxidable, ya sea para delimitar los bordes de una piscina o para organizar diversos espacios como zona de chill-out, huerto o zonas de flores, entre otras.

Y es que, el acero inoxidable es un material de gran resistencia frente a la corrosión y al calor. Por lo que es un componente ideal para ser utilizado en exteriores, resistente y que no se oxida con el paso del tiempo.

Existen distintas variedades de aceros inoxidables, que utilizaremos en función de su mayor resistencia a las temperaturas (los aceros inoxidables ferríticos), aquellos que son más resistentes a la corrosión (aceros inoxidables martensíticos) o bien aquellos aceros de mayor calidad (aceros inoxidables austeníticos).

Una barandilla puede ser la mejor opción que existen zonas con desniveles, así se pueden prevenir caídas y otros accidentes . Además, si disponemos de una piscina y tenemos niños pequeños por medio, también es muy útil instalar este elemento adicional de protección, como un sistema que impida el acceso a la piscina o que, al menos, actúe a modo disuasorio.

Como te adelantamos al principio de la noticia, estas barandillas pueden utilizarse como elemento organizativo y decorativo para zonas de nuestro jardín como un chill-out, zona acondicionada con sillas, sillones y mesa para todas esas reuniones de amigos o familiares.

También, si disponemos de un pequeño huerto, podemos delimitar estas zonas para protegerlas y darles un toque personal de igual manera que se puede hacer en zonas de flores o árboles frutales.